Durante la noche del 12 de septiembre, una granja peletera de Rio San Martino (Scorzé) fue un objetivo con fuego. La oficina principal y el espacio de almacenamiento de la granja ardieron por la colocación de varios dispositivos incendiarios dejándolas completamente destruídas. Un perro fue sacado de allí y llevado tras cortarle la cadena que lo retenía.
El granjero estimó los daños en unos 300.000 Euros.
Ningún animal humano o no humano fue dañado en la acción.
Es al menos el sexto incidente en esta granja durante los tres últimos años. Una furgoneta fue incendiada en Julio del 2017 y miles de visones fueron liberados de sus jaulas en febrero de 2016.